Ecoeficiencia

El concurso Menos papel, más vida, realizado en 2011, migró en el 2012 a la implementación de un proyecto que continuó fomentando la reducción del consumo de papel mediante la intervención de procesos que, históricamente, han demandado muchas impresiones. Para ello se requieren cambios culturales profundos que incluyen la incorporación de hábitos de manejo de la información, tales como escribir, corregir, consultar y archivar utilizando recursos tecnológicos y desestimando el uso del papel en estas actividades, los que no dependen sólo de la reiteración del hábito sino de lograrlo en forma lúdica y didáctica. Es así como sus ejecutores pusieron su creatividad al servicio de las iniciativas, lo que se refleja en algunos de sus nombres: Día sin impresiones, El Misterio del Libro Verde, Hojas Huérfanas, Adictos al papel, Huellas Verdes.